Arranca el juicio contra el boxeador Ricky Santillán
22/02/2016. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Tras haber ganado varios títulos, está detenido. Se lo acusa de violencia de género. Mañana comienza la audiencia de debate.
Alojado en la cárcel local Ricky "El Fantasma" Santillán debe recordar aquel 7 de junio de 2010, el momento en que junto a su entrenador, el exboxeador Aarón Soria, regresaba a su ciudad natal rodeado de una multitud, luego de haber ganado el campeonato argentino de la categoría gallo, un logro nunca antes obtenido por un tartagalense.
Al llegar al humilde barrio San Silvestre, el campeón argentino fue recibido por su familia; rodeado de sus afectos, Ricky no pudo contener las lágrimas por la emoción. Pero antes de descender del vehículo que lo traía, fue a dar una vuelta por su barrio saludando a los vecinos y para cumplir una promesa que les había hecho desde que era un changuito. "Les dije que cuando yo sea campeón iba a ir hasta mi escuela Cacique Cambaí y dar una vuelta con el título", expresó entonces con la profunda emoción que lo embargaban a él, a su familia y a todos los chicos que lo habían visto hacer guantes desde chiquito y que creían que tenía condiciones y madera de campeón.
Ricky defendió su título en varias oportunidades, una de ellas en junio del año 2012 cuando se enfrentó con el dominicano Diego "La Pantera" Pichardo, al que le ganó sin mucho trámite en el combate del Consejo Mundial de Boxeo que por primera vez organizaba un combate en el interior de la provincia.
En septiembre de ese mismo año Santillán se coronaba campeón sudamericano de la categoría al imponerse a un boxeador cordobés en un durísimo encuentro boxístico.
Alojado en la cárcel local Ricky "El Fantasma" Santillán debe recordar aquel 7 de junio de 2010, el momento en que junto a su entrenador, el exboxeador Aarón Soria, regresaba a su ciudad natal rodeado de una multitud, luego de haber ganado el campeonato argentino de la categoría gallo, un logro nunca antes obtenido por un tartagalense.
Al llegar al humilde barrio San Silvestre, el campeón argentino fue recibido por su familia; rodeado de sus afectos, Ricky no pudo contener las lágrimas por la emoción. Pero antes de descender del vehículo que lo traía, fue a dar una vuelta por su barrio saludando a los vecinos y para cumplir una promesa que les había hecho desde que era un changuito. "Les dije que cuando yo sea campeón iba a ir hasta mi escuela Cacique Cambaí y dar una vuelta con el título", expresó entonces con la profunda emoción que lo embargaban a él, a su familia y a todos los chicos que lo habían visto hacer guantes desde chiquito y que creían que tenía condiciones y madera de campeón.
Ricky defendió su título en varias oportunidades, una de ellas en junio del año 2012 cuando se enfrentó con el dominicano Diego "La Pantera" Pichardo, al que le ganó sin mucho trámite en el combate del Consejo Mundial de Boxeo que por primera vez organizaba un combate en el interior de la provincia.
En septiembre de ese mismo año Santillán se coronaba campeón sudamericano de la categoría al imponerse a un boxeador cordobés en un durísimo encuentro boxístico.
Herido y derrotado
Pero en julio pasado mientras veía un partido de fútbol junto a un grupo de amigos, Santillán recibió una herida con un arma blanca que le propinó un adolescente de 17 años, con quien había discutido momentos antes. El menor dijo que intervino cuando vio que Ricky golpeaba a otro de los departientes de la reunión donde se bebía y se jugaba al truco. Ricky estuvo internado un par de días en el hospital Perón de Tartagal.
El 18 de diciembre Santillán debía presentarse en la ciudad de Salta porque iba a recibir un reconocimiento en la entrega de los premios a los mejores deportistas de la provincia . No pudo asistir porque horas antes su esposa lo había denunciado por un grave episodio de violencia de género. En la casa que compartían, en el barrio Kirchner, Ricky le hizo una escena de celos y la agredió. Luego se arrepintió. Su condición de boxeador lo mantiene desde entonces en calidad de detenido y mañana deberá enfrentar el juicio por ese episodio.
Silvio Leclerc es el presidente de la Comisión Municipal de Box de Tartagal, en referencia a la situación del boxeador local aseguró que "Ricky la está pasando muy mal porque es un muchacho que está pagando por un error grave que cometió. Seguramente, y como cualquiera de nosotros, debe hacerse responsable por sus actos".
Segunda oportunidad
Sin embargo, Leclerc aseguró que "una vez que Ricky supere este momento difícil de su vida lo vamos a recibir con los brazos abiertos. El boxeo tiene justamente esa razón de ser, alejar a los jóvenes de los vicios, de la violencia. En Tartagal tenemos más de 200 chicos y chicas entrenando en el gimnasio municipal y otros 5 entrenadores con al menos 20 jóvenes cada uno distribuidos en diferentes puntos de la ciudad. Nuestra mayor alegría es cuando sabemos que un chico que era adicto al paco se recuperó y todo gracias al box y a la contención que entre todos tratamos de brindarles".
El presidente de la Comisión Municipal de Box relató que "tenemos chicas que vienen de historias de vida muy difíciles y que no las querían en ninguna escuela porque eran violentas. Sus vidas han dado un giro total y ahora tienen otra actitud, autoestima, disciplina y respeto hacia el otro. Ojalá que Ricky, que nos ha dado tanta alegría a los tartagalenses, gane esta pelea y vuelva a ser el campeón porque tiene condiciones y todavía tiempo para superarse de esto y encarar cualquier nuevo desafío".