Estamos peor: vamos peor
15/03/2016. Análisis y Reflexiones > Análisis y Reflexiones
El juez de la Corte, Abel Cornejo, ex juez federal, plantea la necesidad de un sinceramiento en las investigaciones de causas por delitos federales, principalmente relacionadas al narcotráfico.
En recientes declaraciones a los medios, el presidente de la corte Suprema afirmó enfáticamente que “vamos peor en los casos de droga”. Si esa aseveración proviniese de cualquier ciudadano sería más que preocupante. Cuando procede del presidente del Máximo Tribunal de Justicia, causa asombro y pasmo. En efecto, sucesos recientes han demostrado el nivel de podredumbre que alcanzó la corrupción intramuros de la Justicia Federal. Particularmente en el norte del país. Hasta la fecha, poco es lo que parece haberse hecho al respecto. Un encumbrado sindicalista, que antes fue oficialista y ahora se convirtió en una suerte de diagnosticador del apocalipsis, sabía desde hacía muchísimos años la situación local. Al igual que la mayoría de los integrantes de la Justicia Federal de Salta y que el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la nación. Incluso éste llegó a proponer a un juez ahora con procesamiento confirmado y pedido de destitución pendiente que integrase una Comisión que se encargaría de hacer una evaluación sobre la situación frontera. ¿Nadie sabía qué pasaba o qué hacía ese juez y sus secuaces?.
Recién cuando el agua llegó al río la Procuradora General de la Nación, con gran tino, envió un fiscal extraño a la jurisdicción quien vino a poner quicio a las notables incurias de sus colegas locales, quienes, desde luego, también sabían de los niveles de corrupción y complicidad que existían con el narcotráfico desde adentro de la justicia. Ahora bien, cuando un abogado militante de la causa de los Derechos Humanos denunció a los alaridos ciertos niveles de connivencia criminal, alguien tomó nota del asunto.
Se quiso cohonestar una pseudo eficiencia local con el ímpetu investigador del foráneo. Sin embargo, en una causa que se ventiló por cohecho a un magistrado en el Tribunal Oral Federal, nada se investigó sobre la persona que es la conexión con las otras causas federales que se investigan respecto de todo lo sucedido en al Juzgado Federal de Orán. ¿Tampoco lo sabían? Desde hace años se viene pregonando la imperiosa necesidad de que hayan cambios estructurales, profundos y definitivos en la Justicia Federal, no solamente en materia de distribución de competencias, sino en la debida y adecuada selección de magistrados y funcionarios del Ministerio Público.
No basta el asombro ni las declaraciones rimbombantes. Sobre todo cuando desde hace mucho tiempo, el secreto a voces, son gritos ensordecedores de alarma.