Cristina, ante el juez: "No soy ni amiga ni socia de Lázaro Báez"
31/10/2016. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
La ex Presidenta contraatacó y pidió abrir una denuncia por la obra pública asignada a Calcaterra. Bonadio mandó a allanar cinco de sus casas en Santa Cruz.
En un contexto bien diferente al de abril, cuando declaró en la causa dólar futuro en la que está procesada por administración infiel, Cristina Fernández de Kirchner fue indagada ayer por el juez Julián Ercolini en el marco del expediente que investiga la adjudicación ilegal de obra pública a Lázaro Báez. La ex presidenta declaró durante dos horas, pero no aceptó preguntas de los fiscales Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques. La indagatoria se detuvo solamente cuando Cristina pidió un breve descanso para pasar al baño y cuando le ofrecieron agua que rechazó amablemente "no por desconfiada" (dijo) sino porque llevaba consigo una botella de agua Glaciar, baja en sodio.
Acusada de direccionar discrecionalmente las obras viales en favor de Báez por $ 16.000 millones, en medio de irregularidades en las contrataciones y sobreprecios, y pese a que muchos emprendimientos no se concretaron, Cristina no contestó preguntas. Ante el juez y los fiscales, aclaró que en todos los gobiernos se pone "gente de confianza", pero consideró "ridícula y sesgada" la acusación en su contra y afirmó: "No soy amiga ni socia comercial de Lázaro Báez". También dijo que no tenía "ni idea" de esos contratos y aseguró que de la obra pública "se encargaba el Parlamento". En esa línea, insistió en solicitar que se realice "una auditoría completa sobre todos los contratos de adjudicación de obra pública en sus gobiernos".
Cristina volvió a denunciar que su situación judicial es una "persecución política", similar a la que ocurre en la región "contra gobernantes que se han esforzado por la inclusión social y los vulnerables". CFK ingresó a las 10.13 al edificio de Comodoro Py 2002 por una puerta lateral, durante toda la audiencia se mantuvo "en calma", según fuentes judiciales, se retiró a las 12.59 por el mismo sitio que había llegado y se dirigió a saludar a los miles de militantes que se acercaron a saludarla.
En paralelo, la ex Presidenta pidió abrir una denuncia contra el actual Gobierno y Ángelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri. "Si los fiscales quieren investigar favorecimientos en la obra pública, que investiguen los favores a Iecsa, la firma de Calcaterra, por parte del gobierno nacional", disparó. A raíz de esos dichos, los fiscales Pollicita y Mahiques resolvieron en la misma audiencia que actuarán de oficio y radicarán hoy una denuncia penal.
Mientras Cristina declaraba en Buenos Aires, la justicia federal realizaba operativos en cinco propiedades suyas en Santa Cruz con el objetivo de "tasar" los inmuebles. Desde el juzgado de Claudio Bonadio, que investiga a la ex Presidenta en la causa Los Sauces, informaron que se trata de "peritajes" dispuestos hace tiempo para obtener una "tasación de las propiedades". El domingo, Cristina alertó a través de Twitter que Bonadio tenía la intención de "allanar" su casa de Río Gallegos.
Por otra parte, durante toda la semana continuarán las indagatorias a ex funcionarios del kirchnerismo por la adjudicación de obra pública a Báez. El ex ministro de Planificación kirchnerista y actual diputado Julio De Vido está citado para hoy a las 10. Mañana será el turno de Báez, detenido desde abril en la causa de lavado de activos, conocida como "la ruta del dinero K". El jueves, en tanto, está prevista la indagatoria de José López, el ex secretario de Obras Públicas que fue arrestado en junio cuando llevó bolsos con u$s 9 millones a un convento y fue detenido por presunto enriquecimiento ilícito.
Fuente: Cronista