Denunciaron a la Policía por apremios ilegales y de "plantar" un arma
30/04/2014. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Francisco Tejeda se emocionó hasta las lágrimas al recordar los apremios y los tormentos a que fue sometido.
Francisco Tejeda se emocionó hasta las lágrimas al recordar los apremios y los tormentos a que fue sometido. Su testimonio conmovió al padre de una de las turistas, lo que generó un incidente en la Sala de Grandes Juicios.
Una jornada cargada de emoción y tensión se vivió ayer en la Sala de Grandes Juicio de la Ciudad Judicial donde se ventila el caso de las turistas francesas asesinadas en julio de 2011 cuando fueron de paseo a la reserva de la quebrada de San Lorenzo para disfrutar de su espectacular belleza. Dos testigos que fueron sobreseídos en causa relataron el drama que vivieron cuando personal de Brigada de Investigaciones trató de inculparlos en el hecho; a uno mediante apremios ilegales y tormentos, y al otro plantándole un arma en su domicilio. Jean-Michel Bouvier, padre de una de las víctimas, se conmovió con el primer testimonio y protagonizó un incidente en el recinto.
Francisco Ariel Tejeda graficó el dolor de un vecino de San Lorenzo por un caso desgraciado que vino a romper la tranquilidad de un apacible pueblo y a empañar con sangre uno de los lugares más bonito de la provincia. Tejeda se emocionó hasta las lágrimas al recordar su propio drama luego de que la policía lo detuviera como sospechosos de los asesinatos de Cassandre Bouvier y Houria Moumni. Contó que lo apresaron cuando salió en busca de su auto que había desaparecido del lugar donde lo dejó estacionado. Dijo que lo llevaron a la comisaría de San Lorenzo, donde lo golpearon salvajemente. En la denuncia que fue leída a pedido de uno de los defensores, Tejeda refirió que en un momento dado su cuerpo no soportó los apremios y se defecó. “Hacían cola para pegarme porque querían que me haga de la muerte de las chicas”, recordó con dolor. El testigo denunció que fue la propia policía quien le sustrajo el auto y con ello le tendieron una trampa para detenerlo. “Cuando fui a denunciar lo la golpiza que recibí me dijeron que no me preocupara porque ya me iban a liberar”. El abogado Marcelo Arancibia (defensor de Daniel Vilte) relacionó los dichos de Tejeda con el testimonio brindado el lunes por el exsecretario Aldo Rogelio Saravia, quien afirmó que “teníamos premura en resolver el caso”. Al mismo tiempo insistió con sus cuestionamientos a la decisión gubernamental de premiar y ascender a un grupo de policías que participó de la investigación del doble homicidio, antes de que el juez Martín Pérez dictara el procesamiento de los imputados. “Seis de esos efectivos hoy está procesados por apremios ilegales”, señaló. Bouvier padre se conmovió con la declaración de Tejeda y le alcanzó una servilleta a través del camarógrafo. Esta situación provocó la inmediata reacción del presidente del Tribunal, Angel Longarte, quien le llamó la atención al hombre por su proceder. Bouvier se levantó como un rayo del asiento y abandonó el recinto con un portazo. Lo que el juez y muchos pensaron es que el francés le había entregado un escrito al testigo. El clima de tensión descendió cuando el camarista Carlos Pucheta mostró que no había nada escrito y que la intención de Bouvier fue alcanzarle la servilleta a Tejeda para que secara sus lágrimas.
También fue patético el testimonio de Raúl Alfredo Sarmiento, otro vecino de San Lorenzo que fue detenido como sospechoso del crimen de las turista. El testigo denunció que para inculparlo la Policía le “plantó” un revolver calibre 22 en su vivienda. Según Sarmiento, la Brigada armó todo un circo y para darle “legitimidad” al ilegal procedimiento llevaron dos testigos. “Yo vi cuando cavaron un pocito a un costado de la cerca y pusieron el arma envuelta en un trapo”, dijo. El testigo sostuvo que la maniobra fue tan burda que cuando levantaron el revolver estaba limpio. “Lo que querían era culparme a cualquier precio”, sentenció.
Los Moumni retornan a Francia
Los familiares de Houria Moumni participaron ayer de la última audiencia de debate al haber decidido retornar a Francia. En tal sentido, emitieron un comunicado en estos términos: “En razón de nuestros compromisos laborales nos vemos en la obligación de retornar a la República de Francia. Partiremos de la ciudad de Salta el miércoles 30 de abril. Seguiremos la continuidad del proceso a través de internet y en constante comunicación con nuestros abogados. Todos los integrantes de la familia Moumni hacemos pública nuestra absoluta confianza personal y profesional en los abogados que nos representan en el juicio (Nicolás Durrieu, Federico Rodríguez Spuch y Nicolás Ortiz”.
Firman el escrito Lohucine y Zohora Moumni y sus hijos Fadil y Majid.