El caso Reynoso está entre los diez hechos criminales que conmovieron al país en 2015
03/01/2016. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
El diario Clarín hizo un balance sobre los diez casos criminales que conmovieron al país en 2015. En séptimo lugar ubicó al caso del suspendido juez de Orán, Raúl Reynoso.
"Hasta el 3 de noviembre, el juez federal de Orán (Salta), Raúl Reynoso, era considerado un paladín antidrogas. Pero ese día se supo que la Justicia lo imputaba por haber ayudado, protegido y liberado a narcos a cambio de jugosas coimas, tales como la entrega de un campo de 700 hectáreas. Si no lo detuvieron fue por sus fueros, pero sí cayó una red de abogados y empleados judiciales que habrían actuado como intermediarios en las gestiones. El magistrado, que sostiene su inocencia, está suspendido en su cargo, pero libre”, dice en su síntesis Clarín.
“Algunos de los casos tuvieron un cierre, como el crimen de Ángeles y la muerte de la madre del sommelier. Otros tienen final abierto, como el del juez Reynoso y la guerra en La Salada”, agrega.
El más importante
En primer lugar la pubñicación ubica al secuestro de Rebagliati, dueño de la empresa CINTRA (dedicada a la limpieza ambiental, ubicada en Tres de Febrero), al empresario Daniel Rebagliati lo secuestraron el 28 de abril y lo tuvieron cautivo ocho días, hasta que su familia pagó un rescate de 1.800.000 pesos. En el medio amenazaron con cortarle un dedo, lo picanearon y lo sometieron a simulacros de fusilamiento. Por el caso hubo una docena de detenidos, incluido un ex policía de la Federal.
La condena a Mangeri El 15 de julio tuvo su capítulo final el crimen de Ángeles Rawson (16), ocurrido el 10 de junio de 2013 en su edificio de Palermo, con una condena a prisión perpetua. La Justicia determinó que el portero, Jorge Mangeri, la atacó cuando volvía del colegio, intentó violarla y, como la adolescente se resistió, la estranguló hasta matarla.
Glew: una muerte inexplicable. Melisa Tuffner (22) apareció embarrada y con dos golpes brutales en la cabeza, tirada en una calle de tierra de la localidad bonaerense de Glew. Luego de tres días de agonía, en la madrugada del 22 de julio terminó muriendo en una clínica porteña. Había salido de su casa para ir a un centro comunitario y de allí planeaba ir a la cancha de Temperley con su familia. Nunca llegó. Un mes y medio más tarde, gracias a las cámaras de seguridad, identificaron al autor: un vecino de su familia, que la había seguido, la había atacado –por causas nunca aclaradas– y la había matado a golpes. Un día antes de entregarse, el hombre había ido a su casa y le había dado el pésame a su padre.
El matrimonio de policías: El doble asesinato se convirtió en un símbolo de la inseguridad en el Conurbano: el 1° de septiembre, el oficial ayudante de la Bonaerense Sergio Fernández (29) y su esposa, la sargento Betiana Bringas (30), fueron sorprendidos frente a su casa de Laferrere (La Matanza) por ladrones que quisieron robarles el auto. Se defendieron y los asesinaron a tiros. Dejaron una hija de 4 años.
El final de “Carbón Blanco”: El 17 de septiembre, un tribunal federal del Chaco condenó a penas de entre 12 y 21 años de prisión a los cinco acusados del mayor contrabando de cocaína a Europa de la historia: una tonelada de droga enviada en cargamentos de carbón.
El “narco-arroz”. El caso se hizo público el 22 de septiembre: había caído una banda que intentaba exportar cocaína impregnada en arroz rumbo a África, disfrazada bajo el envío de alimentos en el marco del plan de ayuda de Naciones Unidas, “Hambre Cero”. La organización estaba liderada por dos hermanos colombianos: Erman y Willians Triana Peña, que poseían vínculos con miembros del temible cartel del Norte del Valle.
Fuente: Nuevo Diario