El Senado convirtió en ley la reforma en la Magistratura y se viene la judicialización
09/05/2013. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Pese a las críticas de los sectores opositores el Gobierno avanzó con uno de los proyectos más controvertidos de la reforma.
Un voto más que lo necesario consiguió el oficialismo del Senado para transformar en ley el proyecto relativo a los cambios en el Consejo de la Magistratura. En una sesión breve en tiempos parlamentarios, que se extendió desde las 14 hasta poco después de las 20, el Frente para la Victoria logró obtener 38 votos positivos, contra 30 negativos. Así, la parte más polémica del paquete judicial, que incluye también a la limitación de uso de las cautelares contra el Estado y a la creación de tres nuevas Cámaras de Casación, se convirtió en ley. Se espera ahora que, a partir de la promulgación de las mismas por parte del Ejecutivo, se produzca una gran cantidad de demandas de diferentes sectores sobre su inconstitucionalidad.
Como un deja vu de lo votado a mediados de abril, y mientras la oposición se movilizaba frente al Congreso, el Senado volvió a tratar la reforma en el Consejo, esta vez retocada por sugerencia del titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, que logró que la administración financiera del Poder Judicial siga siendo potestad del máximo tribunal y que los jueces puedan seguir eligiendo a sus secretarios de confianza, en lugar de que esos cargos sean concursados. La exposición por el oficialismo la inició el senador por Neuquén Marcelo Fuentes, quien desde su cargo actual de consejero de la Magistratura defendió el proyecto y rechazó los agravios de las fuerzas políticas que decían que la norma es proscriptiva, asegurando que todo los partidos políticos que puedan presentar candidatos a presidente van a poder presentar candidatos a consejeros.
Las declaraciones de Fuentes tenían que ver con que el punto más polémico de los cambios introducidos por el oficialismo de Diputados, que centralizó gran parte de las críticas de la oposición, fue la modificación de un artículo que establece que solo podrán presentar candidatos a consejeros en una misma boleta los frentes electorales o partidos que tengan la misma denominación en al menos 18 provincias. El oficialismo presentó la propuesta como una defensa de los partidos políticos, mientras los sectores anti-K consideraron que se trata de una ventaja importante que tendrá el FPV, única agrupación que podrá tener una boleta propia en todos los distritos.
El presidente del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Pichetto aseguró que en la Argentina no se persigue a ningún juez, ni a fiscales ni al Poder Judicial. Pichetto, como su par Aníbal Fernández, calificó de vergonzosa intromisión en la política argentina las críticas de la relatora Gabriela Knaul de Naciones Unidos.
Como contrapartida, el radical Ernesto Sanz afirmó que la reforma del Consejo de la Magistratura es un avance de un gobierno que está acorralado, temeroso y desorientado para terminar con el único bastión que no pudo controlar: la Justicia. El justicialista federal Adolfo Rodríguez Saá, mientras reclamó contra la proscripción de los partidos de oposición, y su coterránea Liliana Negre afirmó que el gobierno quiere lograr la suma del poder público.
La primera votación del Senado sobre el tema se había realizado el 17 de abril, con 39 sufragios positivos contra 31 negativos. Los cambios de ayer fueron la ausencias del neuquino Horacio Lores en el oficialismo y de María Eugenia Estenssoro en la oposición. Además, a última hora, el Senado buscaba convertir en leyes otros dos proyectos, los que impulsan que todas las causas judiciales y las declaraciones juradas de los miembros de los tres poderes sean de acceso público. También se trataba el proyecto de Ingreso Democrático al Poder Judicial, que tras recibir cambios, se encaminaba a lograr la media sanción para luego convertirse en ley en Diputados.