Enfermero de ATSA; curandero y detenido por abuso sexual
20/09/2016. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Fue ampliada la imputación penal contra José Alejandro Vázquez, detenido por el abuso sexual de dos menores en San Antonio de los Cobres. En un allanamiento a su vivienda y por las testimoniales de vecinos, se confirmó que el acusado ejercía el arte
El secuestro de numerosas cajas con medicamentos, ampollas y otras esencias, supuestamente curativas, como así también el hallazgo de una caja con 19 cuadernos manuscritos con la historia clínica de cientos de pacientes, más las declaraciones testimoniales de vecinos, condujeron al fiscal penal de Rosario de Lerma, Gustavo Torres Rubelt, a ampliar la acusación penal de Vázquez.
El sujeto, de 60 años y recibido como enfermero en ATSA, se encuentra detenido a partir de una investigación penal que llevó adelante el fiscal Torres Rubelt en torno a las denuncias de abuso sexual realizadas en su contra por la madre de dos menores de San Antonio de los Cobres.
La fiscalía también avanzó en el allanamiento en la vivienda de Vázquez, donde los policías secuestraron una gran cantidad de cajas con medicamentos para distintas dolencias. Se hallaron comprimidos y ampollas inyectables, Crema Viborina, Vaselina Líquida, Uña de Gato, Crema de Lechuga y una botella de aceite que es motivo de estudio. También se secuestró una caja de metal con tijeras, pinza, tensiómetro, estetoscopio y un manual de enfermería.
Se sumó el hallazgo de una caja con 19 cuadernos que contienen el seguimiento de numerosos pacientes
La ampliación por curanderismo
La fiscalía citó a varios vecinos que confirmaron que Vázquez era el curandero de esa localidad y que cobraba por ello e incluso señalaron que en la puerta de su casa había un afiche con el horario de atención.
En vista de estos elementos de pruebas, Torres Rubelt decidió ampliar la imputación penal contra Vázquez por el delito de “curanderismo”, contemplado en el artículo 208 del Código Penal, con una pena de hasta un año de prisión.
De las pruebas reunidas, “se tiene que el acusado ejercería sin título ni autorización el arte de curar como actividad lucrativa, anunciando dicha tarea mediante afiches en la puerta de su domicilio con horario de atención, y asimismo recetaría, en forma habitual, según dichos de las denunciantes y de los testigos, diferentes tipos de medicamentos y otros tratamientos para curar distintas enfermedades a las personas. Hecho que encuentra a prima facie su encuadre legal en el delito de “curanderismo”, tipificado por el Art. 208”.
Fuente: El Acople Informativo