Natalia Colombo: "Fue clave analizar las inconsistencias en las declaraciones"
08/12/2024. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
La psicóloga Natalia Colombo, del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), ha desempeñado un papel crucial en uno de los casos más resonantes de los últimos años: la desaparición y homicidio de María Cash.
La psicóloga Natalia Colombo, del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), ha desempeñado un papel crucial en uno de los casos más resonantes de los últimos años: la desaparición y homicidio de María Cash. Con dos años de dedicación en este caso, Colombo ha aportado su experiencia en perfilación criminal y análisis conductual para desentrañar detalles sobre el acusado, Héctor Romero. En una entrevista exclusiva con El Tribuno, compartió cómo su equipo utilizó herramientas avanzadas, desde análisis lingüístico hasta estudios conductuales, para construir un perfil detallado del imputado.
A lo largo de la conversación, Colombo reflexiona sobre los desafíos de este tipo de investigaciones y el impacto de la cosificación de la víctima. En un tono cercano y técnico, la especialista describe el impacto que este caso ha tenido en su carrera y profundiza en las dinámicas que rodean al crimen desde el punto de vista psicológico. Sin dar nombres, Colombo destacó el trabajo de los investigadores del Cuerpo Especializado que estuvo abocado al caso.
Usted es psicóloga del CIF y fue responsable de hacer la perfilación del camionero Héctor Romero, acusado del homicidio de María Cash. Sabemos que, por limitaciones del proceso judicial, no podemos entrar en detalles de las pericias que realizó, pero sí nos interesa conocer su trabajo, que es muy detallado y profundo. Hace dos años que está involucrada en este caso. ¿Cómo se lleva a cabo una tarea como esta? ¿Qué patrones de conducta son determinantes para elaborar la perfilación de una persona?
Bien, en este caso en particular, partimos de un expediente con muchísima información acumulada. Una cosa es la técnica del perfil criminal en casos de autores desconocidos y otra es trabajar cuando ya se cuenta con datos concretos. Aquí, tomamos la técnica del perfil, pero nos enfocamos sobre todo en el análisis conductual. Esto significa interpretar y cotejar información, incluso aquella obtenida de antenas telefónicas.
Este no es un trabajo solitario, sino en equipo. Interrelacionamos los elementos que surgen en la investigación: desde cómo una persona se mueve en su lugar de residencia, hasta sus hábitos laborales, qué caminos recorre al trabajo, sus horarios y compras. Todo se coteja con evidencias, como pericias telefónicas y otros análisis, para llegar a una conclusión sobre cómo una persona se comporta y se mueve en el mundo.
Además de las llamadas telefónicas, los rastreos de antenas y las inconsistencias en las declaraciones, ¿qué otros elementos pueden marcar a un patrón delictivo o criminal?
En este caso puntual, fue clave analizar las contradicciones e inconsistencias en las declaraciones. Nos manejamos siempre con inferencias: observamos qué omite la persona, cómo lo hace y en qué momento. Realicé un análisis de discurso basado en la lingüística y en teorías psicológicas, lo que nos permitió identificar patrones verbales que indicaban evasión o simulación.
"La cosificación de la víctima es un indicador relevante en la conducta delictiva".
Por ejemplo, cuando una persona evita comprometerse o eludir una pregunta, eso puede reflejar que está ocultando información. Esto se respalda con un soporte teórico robusto que incluye análisis lingüístico, patrones de comportamiento y psicología. Así, podemos determinar si alguien está mintiendo, ocultando información o simplemente evitando ser cuestionado.
Un detalle que llamó la atención en el expediente es que el imputado recordar, en sus declaraciones sobre María Cash solo de la cintura para abajo. ¿Qué significa esto?
Eso tiene que ver con lo que llamamos eventos de naturaleza disruptiva. Son situaciones que rompen con la rutina y dejan una marca en nuestra memoria. En este caso, esa fijación en un detalle específico puede indicar una cosificación de la víctima. La persona deja de ser percibida como tal y se convierte en un objeto. Esto también es un indicador relevante cuando analizamos conductas delictivas.
En las conversaciones relacionadas con el caso, también se percibe esta idea de cosificación. Algunas personas del entorno de Romero se refieren a María Cash de manera despectiva, incluso insultándola. ¿Qué opina sobre esto?
Esto refuerza el concepto de cosificación. Es una muestra de cómo la víctima deja de ser vista como un ser humano. Cuando trazamos un perfil, consideramos estos elementos para entender el contexto y cómo opera la persona implicada. Este tipo de conductas habla mucho de las dinámicas en las que se desarrollan los hechos.
En términos de investigación, ¿cómo se detecta la mentira? Es decir, ¿cómo logran identificar cuando alguien intenta ocultar información?
Nuestra mente es muy compleja y utiliza diversos mecanismos de defensa. Sin embargo, cuando se realiza un análisis minucioso y se formulan preguntas adecuadas, es posible identificar inconsistencias. Interpretar tanto lo verbal como lo no verbal es clave. La teoría psicoanalítica, por ejemplo, habla de cómo el inconsciente se filtra a través de actos fallidos o equívocos. Con paciencia y herramientas adecuadas, podemos descubrir lo que alguien intenta esconder.
Nos comentaron que incluso analizó la mercadería que se transportaba el camionero. ¿Qué tipo de información pueden aportar estos objetos?
Estos detalles forman parte del análisis general. Cada elemento es importante porque contribuye a construir un panorama completo. Este trabajo no es individual, sino en equipo. Contamos con especialistas en telefonía, analistas de conducta criminal, psicólogos y otros investigadores que aportaron desde sus respectivas áreas. Yo me encargué de integrar los patrones de conducta del acusado y presentar las conclusiones.
Al inicio eran ocho personas en el equipo, pero luego quedaron cuatro. ¿Por qué ocurrió esto en un caso tan complejo?
Fue una cuestión de etapas y tiempos. Al inicio, el análisis era más amplio e incluía todas las hipótesis posibles. A medida que avanzamos y descartamos líneas inviables, nos enfocamos en los puntos más relevantes. Esto nos permitió reducir el equipo y centrarnos en las áreas clave sin perder efectividad.
¿Cómo marcó este trabajo su carrera profesional? Es un caso muy diferente al resto, ¿verdad?
Sí, totalmente. Este caso ha despertado una gran pasión y compromiso en mí. Ver que nuestro trabajo podía aportar a la causa nos motivó mucho. Sin dudas, ha sido una experiencia profesional que me marcó profundamente.
Un dato importante que llama la atención en este caso es la descripción de un olor. En las declaraciones, el camionero menciona: "Me acuerdo del olor, muy fuerte". ¿Por qué los olores quedan grabados en nuestra mente? ¿Qué ocurre desde el punto de vista psicológico?
Todo depende del caso en particular. La memoria olfativa tiene que ver con la cercanía que una persona puede haber tenido con otra. Hay disparadores en nuestra historia personal que hacen que ciertos olores se inscriban en nuestra memoria. También hay personas que no registran olores, ni buenos ni malos. Pero otras sí, y esas características individuales pueden hacer que un olor específico quede marcado como una huella en el recuerdo, listo para repetirse o evocarse.
Desde su experiencia profesional, después de tanto trabajo en casos complejos, ¿qué es lo que más le preocupa como sociedad en términos delictivos o de conducta?
Creo que hoy en día hay una cultura un poco desvirtuada en algunas cuestiones, especialmente en cuanto a límites y entendimiento. Curiosamente, veo más problemas con las personas mayores que con los jóvenes. Por ejemplo, en el tema de delitos sexuales, noto una mayor conciencia y aceptación de un "no" entre los chicos jóvenes. Esto lo digo no solo desde mi experiencia en el CIF, sino también desde mi trabajo en consultorio. Los jóvenes parecen tener más conciencia, lo cual es alentador.
¿Puede ser que, culturalmente, haya existido esta idea en los hombres machistas de que cuando una mujer dice "no", en realidad está insinuando un "sí"? Eso está mal claramente.
Sí, lamentablemente, eso es algo que ha atravesado nuestra sociedad por mucho tiempo. Sin embargo, no es válido en lo absoluto. Para que realmente haya un cambio significativo en temas de seguridad y prevención del delito, creo que la clave está en la educación. Nos educamos en muchas cosas, pero no en gestión emocional. Si enseñáramos a los niños a conectarse con sus emociones, a identificarlas y a expresarlas –enojo, tristeza, ira, amor–, podrían entenderlas en sí mismos y en los demás. Si alguien no puede reconocer un "no", es porque no ha internalizado límites ni está conectado con su mundo emocional.
Hace poco vi una serie sobre los hermanos Menéndez, condenados por el asesinato de sus padres, que argumentaron haber sufrido abusos. Uno de ellos cuenta el crimen al psicólogo porque no soportaba la culpa. ¿El sentimiento de culpa afecta a los delincuentes?
Por supuesto. Excepto en estructuras de personalidad psicopáticas o perversas, la culpa es el eje central en todas las personas. No debemos creer que solo los psicópatas o los perversos cometen delitos. Cualquier persona, con cualquier estructura de personalidad, puede cometer un delito. En las estructuras más comunes, que son las neuróticas, la culpa está presente como base. Es una emoción clave.
Me interesa mucho profundizar en algo básico: ¿qué hacen las personas perversas?
Son personas que disfrutan causando horror en los demás, ya sea físico o emocional. Su goce radica precisamente en provocar ese horror, lo que los lleva a cometer delitos o conductas extremas que generan rechazo social. Su objetivo no es otro que ese: causar sufrimiento.
"La memoria olfativa puede ser un disparador poderoso, dejando huellas en el recuerdo".
¿Y los psicópatas? ¿Cómo se diferencian de los perversos?
El psicópata busca beneficio personal en todo lo que hace. En el ámbito delictivo, manipula y gestiona relaciones únicamente para obtener ventajas. No siente empatía y no puede ponerse en el lugar del otro. Su único objetivo es sacar provecho de las personas a su alrededor, y lo hace de manera calculada.
¿Algún caso en particular de un perverso ha llamado su atención o la ha impactado?
Sí, hay muchos casos interesantes. Una característica del perverso es que nunca acudirá a terapia psicológica. Mientras que el psicópata puede fingir y simular para obtener algún beneficio, el perverso no se molesta en hacerlo. Recuerdo el caso de un asesino serial ruso que confesó haber asesinado a más de 50 personas, aunque se cree que hubo más víctimas. Este hombre era profesor universitario, reconocido y respetado, pero atacaba niños en estaciones de tren. Violaba a sus víctimas con objetos, les sacaba los ojos, y muchas de ellas estaban vivas durante las torturas. Es un ejemplo claro de estructura perversa.
¿Cómo se detectan signos de perversidad en una persona? ¿Es algo que se manifiesta desde la infancia?
Sí, la estructura de personalidad comienza a formarse en la infancia y se completa hacia los 18 años. En niños de 7 u 8 años ya pueden aparecer actitudes preocupantes, como crueldad hacia animales: matarlos, despellejarlos o hacer experimentos. Estas conductas se vinculan al placer y escalan con el tiempo. En los asesinos seriales, por ejemplo, vemos que el tiempo entre el primer homicidio y el segundo suele ser más largo, pero luego esa brecha se acorta porque necesitan esa adrenalina y ese placer de forma más frecuente.
En el caso de María Cash, ¿tuvo los recursos necesarios para llevar adelante su trabajo?
Sí, absolutamente. El equipo fue fundamental, y el fiscal siempre mostró apertura y disposición. Cada sugerencia que hacíamos era evaluada minuciosamente, y aunque algunas no eran aceptadas, el trabajo fue muy bien coordinado. Fue una gestión impecable.
¿Analizó la conducta corporal del acusado en este caso?
No puedo hablar de eso en este caso específico.
Pero, en general, ¿es clave en otros casos?
Sí, absolutamente. Es un elemento muy importante en el análisis de cualquier perfil.
Fuente de la Información: El Tribuno